Quiero compartirles mi testimonio, para empezar les voy a platicar que tengo un hijo que se llama Diego el cual es un niño hermoso. Todo empezó en Diciembre cuando Die enfermo de una gripe muy leve que con el tiempo se complicó, ningún medicamento le hacía efecto hasta que un día tuve que internarlo porque me dijeron que tenía bronconeumonía, así transcurrieron casi 8 meses hasta que mi hijo ya no soportaba ningún medicamento y todos los días tenia gripe, fiebre, flemas, etc. Un día mi jefe me platicó que su esposa estudiaba la Ciencia Cristiana y como esto los había ayudado en muchas cuestiones y pues nos invitó un día a su casa para que platicarnos con su esposa, ella nos dio toda una tarde de plática para explicarnos como funcionaba la Ciencia Cristiana y pues a mí me pareció muy interesante y empecé a leer el libro que nos regaló.
Después nos comentó que vendría la Sra. ELise Moore a dar unas conferencias sobre Ciencia Cristiana y como orar para tener y estar mas cerca de Dios, asistí y me gusto mucho y empecé a poner en práctica lo que poco a poco aprendía.
Una noche mi hijo enfermó otra vez con sus problemas de bronquitis empezó a tener dificultades para respirar, fiebre, tos, llanto y mas llanto yo estaba sola, no tenía carro, no tenía medicina, no tenía dinero, ni teléfono para hablarle a alguien que me ayudara, pero me acordé de lo que había aprendido en la Conferencia de la CC y lo empecé a practicar y empecé a orar afirmando que mi hijo era un hijo de Dios que estaba hecho a su imagen y semejanza por lo tanto no podía estar mal porque Dios todo lo hizo bien y sin sufrimientos, que era un niño alegre, inteligente y sano; así que de pronto mi hijo empezó a respirar tranquilo, dejo de llorar, su pecho le dejo de hacer ese espantoso ruido de siempre y se quedó dormido. Desde entonces mi hijo no ha vuelto a enfermarse hoy es un niño completamente sano y esto para mi fue la prueba más grande del poder que tuvo en mí la Ciencia Cristiana.
- E. Diaz
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